Con el propósito de reducir la contaminación, las autoridades de la ciudad de Barcelona prohibieron el uso de algunas calles a los carros viejos.
Los vehículos movidos a gasolina anteriores al año 2000 y los movidos a Diesel anteriores al año 2006, no tendrán acceso a una zona de casi 60 kilómetros cuadrados en una ciudad que totaliza 102.
Esa restricción usa el mismo esquema del pico y placa de Bogotá, pues se aplica de lunes a viernes, entre las 7 de la mañana y las 8 de la noche y quienes la violen, tendrán que pagar una multa entre 100 y 150 Euros. Los primeros tres meses del año y como medida educativa, habrá llamados de atención sin multa para quienes sean detectados por las más de 150 cámaras instaladas en la zona.
Habrá una excepción de 12 meses para vehículos de despacho y para personas que puedan demostrar que sus ingresos son inferiores a 8000 Euros por año, al igual que ciudadanos extranjeros que tramiten un permiso especial.
Según las autoridades, la norma afectará a unos 50 mil vehículos particulares en el primer año y crecerá en 2021 cuando se amplíe a buses y vehículos comerciales.
Barcelona es una de las ciudades Europeas que no logró mantener los niveles de contaminación en los límites impuestos por la Unión Europea desde 2002 y la baja calidad del aire causó la muerte de 424 personas entre 2010 y 2017, según reporte de las autoridades de salud de la ciudad.