Recibimos el nuevo Serie 1 Hatchback y la primera impresión es la de un carro muy distinto a su predecesor, comenzando por la figura.
Comenzando por la parrilla que tiene algunos detractores y otros fans, en mi caso, me sumo al club de los últimos. Me parece que le da una figura fresca y muestra la agresividad que nunca antes tuvo. De hecho, en alguna oportunidad comenté que esta serie tenía cara triste; algo que en esta versión cambió.
Cambió también el interior y hay que decirlo, muy a favor; comienzo por el asiento de atrás, que se favoreció ampliamente; algo que los pasajeros agradecen en silencio cuando es bueno y se quejan rotundamente cuando no lo es.
El techo de cristal, para mi obligatorio en los carros, en este es espectacular por su tamaño y la luz que entra a través de él, en mi caso, la agradezco.
El puesto del conductor es el cambio más fuerte a la vista y otro punto para enaltecer; hay dos pantallas de 10.2 pulgadas: una detrás del timón y otra a su lado, cada una con objetivos específicos y complementarios. La primera con información de viaje y la segunda, para info entretenimiento.
La pantalla detrás del timón tiene algunas posibilidades de configuración dirigidas especialmente al modo de manejo; por ejemplo, en el modo Eco, es útil tener la información de consumo mientras que para el modo Sport puede ser información de fuerzas G o en cualquier momento, la lista de canciones.
La pantalla sobre el tablero, ofrece la innegable ventaja de replicar la pantalla del celular, en mi caso con CarPlay y con eso, el ahora obligatorio seguimiento de los radares de velocidad que ofrece Waze.
Ya en movimiento, el Serie 1 es un carro ágil como siempre ha sido; rápido y bueno para reaccionar sin ir a extremos. La suspensión es un poco rígida para mi gusto, pero es un carro con el que se gana un pique en un semáforo sin mucho esfuerzo, que se mueve en el tráfico sin problemas gracias a su tamaño y que ahora, gracias al asistente de parqueo, estaciona solo, prácticamente sin intervención del conductor.
La visibilidad hacia atrás no ha sido tradicionalmente su fuerte; sin embargo, los espejos y las cámaras compensan la falta del vidrio trasero, incluso en tiempos de lluvias fuertes como el que nos tocó durante la prueba.
Ah, y sí, el Serie 1 ya no tiene tracción trasera. En mi caso, para las vías que recorro, la velocidad a la que lo hago y mis deseos deportivos, realmente es irrelevante, como estoy seguro, será irrelevante para más del 90 por ciento de los conductores colombianos.
El consumo del BMW Serie 1
Aclaramos que nuestros datos de consumo se obtienen de tráfico vivo en Bogotá y sus alrededores, por lo que no cumplen con un método científico estricto.
En ciudad, usando modo Eco la mayor parte del tiempo, logramos 41.95 kilómetros por galón y en carretera, llegamos a los 56.7 kilómetros por galón.