- Asocaña y Toyota celebran que el Gobierno Nacional considere al bioetanol colombiano como una alternativa para la transición energética.
- Presentamos el vehículo híbrido ‘Flexie’, un Corolla Cross Hybrid que se mueve con bioetanol producido con caña de azúcar colombiana.
- Cerca de 8 millones de toneladas es la reducción de CO2 que ha permitido la oxigenación de la gasolina con bioetanol en los últimos 18 años en Colombia. Esto equivale a haber sembrado poco más de 61 millones de árboles.
Como una muestra del desempeño que pueden tener los vehículos que se mueven 100 % con bioetanol, Asocaña y la marca Toyota presentan el primer automotor en el país que combina el uso de este combustible con energía eléctrica, una alternativa de movilidad sostenible debido a que su huella de carbono es significativamente menor a los movidos por gasolina, a la par que reduce otros elementos contaminantes a la atmósfera.
El Toyota Corolla Cross XRX Hybrid ha recorrido 4.128kilómetros en nuestro país, haciendo presentaciones en ciudades con climas y geografías muy diversas como Cali, Pereira, Medellín, Cartagena y Bogotá, para que los colombianos conozcan las características y ventajas de conducir un vehículo con esta tecnología, que se abastece 100 % con bioetanol producido por manos colombianas.
“Desde los ingenios azucareros entendemos que la matriz energética del país requiere del aporte de diferentes fuentes de energía renovable, donde el bioetanol es una alternativa competitiva y de gran potencial para la movilidad sostenible y la descarbonización. Venimos trabajando de la mano del Gobierno Nacional para que se establezcan políticas públicas y seguridad jurídica que incentiven la inversión y promuevan la producción de bioetanol colombiano”, afirmó Claudia Calero, presidenta de Asocaña.
El Toyota Corolla Cross XRX Hybrid que se mueve con bioetanol representa un hito para el país en el marco de la ruta de la transición energética, pues es una oportunidad para consolidar el uso de mezclas superiores de biocombustibles, en este caso con el bioetanol de caña de azúcar, un producto 100 % colombiano que crece en los campos colombianos; al tiempo que se mitigan las emisiones de CO2 y de material particulado. Con este vehículo se reafirma que los biocombustibles son una solución inmediata a la dependencia de los combustibles fósiles, que está al alcance de los colombianos.
“Como compañía nos encontramos en un periodo de transición hacía una movilidad sostenible. En Colombia hemos trabajado en conjunto con actores privados de la industria energética y agricultora, bajo el objetivo de contribuir al desarrollo de nuevas alternativas de transporte responsables con nuestro entorno. En este encuentro reafirmamos que los biocombustibles son una solución al alcance de nuestras manos, que aporta al desarrollo social y económico de la industria del país. Creemos que la estrategia para lograr una reducción de la huella carbono está en la diversificación de tecnologías ofreciéndole a los colombianos opciones con recursos renovables que nos permitan seguir avanzando hacia el futuro de la movilidad para todos”, mencionó Alexandra Pfeil-Schneider, vicepresidente de Planeación en Automotores Toyota Colombia.
Este tipo de vehículos no solo es más amigable con el medio ambiente, sino que al utilizar bioetanol de caña de azúcar se contribuye con el bienestar de miles de colombianos, pues la agroindustria de la caña impacta de forma positiva el desarrollo económico y social de cinco departamentos del país en los que se produce esta materia prima, donde se generan más de 286 mil empleos directos e indirectos, así como encadenamientos productivos que permiten la compra de insumos por más de 5 billones de pesos, en su gran mayoría de origen colombiano.
“Hace 18 años se inició la oxigenación de la gasolina en Colombia con bioetanol. Esta experiencia nos permite, sin temor a equivocarnos, decir que es la alternativa de movilidad sostenible más fácil de implementar en nuestro país, pues se cuenta con la infraestructura para su distribución. Es por esto que estamos convencidos que es posible que marcas como Toyota traigan estos vehículos a Colombia de forma masiva, pues ya son utilizados en países como Brasil como parte de su apuesta para el cumplimiento de las metas en reducción de emisiones de gases efecto invernadero”, puntualizó Calero.
El programa de oxigenación de la gasolina en Colombia con bioetanol ha permitido la reducción de cerca de 8 millones de toneladas de CO2 equivalente en los últimos 18 años. Esto equivale a haber sembrado poco más de 61 millones de árboles.