Las series pares son particulares en BMW y si a ellas se suma el hecho de ser un Gran Coupé el resultado es este vehículo, gran llamador de atención.
El Exterior del BMW 418i Gran Coupé
Este modelo debe su nombre al diseño de su mitad trasera, que a la vez es su atractivo principal.
Es la mitad trasera lo que le da al Gran Coupé la presencia más imponente y a la vez masiva, que atrae los ojos hacia él.
Y una vez los ojos allí, muchos preguntan si Coupé no significa “dos puertas”, por lo que a ellos hay que aclararles que Coupé es una palabra proveniente del francés que significa “recortado” y aplica tanto para carros de dos puertas, como para algunos de cuatro, como este.
Para BMW, los Gran Coupé, son carros con el techo alargado hasta el extremo trasero y son, de cuatro puertas.
El Interior del BMW 418i Gran Coupé
El mayor espacio en un carro, siempre será algo para agradecer y el techo del Gran Coupé le permite ofrecer mayor espacio para los de atrás. Por lo tanto, se agradece.
Al frente, el 418i Gran Coupé tiene el tablero conocido de la Serie 4, con una pantalla ancha sobre él y las amenidades estándar en cuanto a sistema de info entretenimiento: Computador a bordo con contadores acumulados y parciales, conexión bluetooth y el ahora necesario soporte para CarPlay.
El Motor y la Transmisión del 418i Gran Coupé
Esta versión siendo la menor, se impulsa por un motor de 3 cilindros, con 136 caballos de potencia y 220 Nm de torque. Se empata a él, una caja automática de 8 marchas, que entrega el movimiento a las ruedas traseras.
Las Ayudas al Conductor del BMW 418i
El 418i cuenta con varios sistemas de ayuda al conductor, entre ellos:
- El obligatorio Anti Bloqueo de los frenos (ABS)
- Control Dinámico de Estabilidad (DSC)
- Control Dinámico de Tracción (DTC)
- Cámara trasera con guías
- Sensores de proximidad traseros
- Sensor de luminosidad
- Sensor de humedad en el parabrisas
- Paquete de Iluminación LED
La Prueba de Manejo del BMW 418i Gran Coupé
Nos entregaron el Gran Coupé en la nueva vitrina de Autogermana de la autopista con 198. Mucho más descongestionada y cómoda que la tradicional y hay que decirlo, María Paula hace la experiencia inmensamente más amable.
Seguido al buen servicio, subimos al 418i para disfrutar de la amplitud interior, la inmediata conexión del celular con el sistema de info entretenimiento y la fortuna de salir de un lugar donde el tráfico bogotano es aún ligero.
Recorrimos Bogotá de extremo a extremo; algo que nos obliga la prueba de consumo, con la buena cosa de estar en una cabina amable y cómoda, que permite un viaje de una hora sin bajarse agotado del vehículo, con la seguridad que ofrecen los controles en el timón y la tranquilidad de las grandes llantas run flat de 18 pulgadas.
Recorrer Bogotá, no es una actividad que pase desapercibida, aunque los bogotanos nos hayamos acostumbrado; pues el tráfico es de los más pesados del mundo, la gentileza de las calles no es de resaltar y el piso de las calles bogotanas es simplemente deplorable.
Por eso, probar un carro en Bogotá es una buena cosa que lleva a identificar puntos que en otra parte podrían pasar desapercibidos, como la suspensión, que es nuestro primer punto de consideración y una fortaleza del 418i GC, porque se nota el trabajo que ha hecho la marca para suavizar y mejorar la calidad de marcha en malas superficies y adicionalmente, el vehículo mantiene de manera adecuada su horizontalidad, gracias a que son las ruedas las que se mueven hacia arriba y hacia abajo. En lenguaje claro, se sacuden las ruedas y no los pasajeros.
El otro punto que no se puede pasar por alto, es la insonorización de la cabina. Este es un punto en el que todas las marcas de alta gama trabajan y en que en general, son buenas; sin embargo, en este modelo nos pareció particularmente notable: tanto de los ruidos del ambiente, como los del camino y del mismo vehículo.
La prueba de consumo del BMW 418i Gran Coupé
En cuanto al consumo de combustible, tuvimos los siguientes resultados:
Consumo en ciudad: 38.6 kilómetros por galón
Como siempre aclaramos que nuestra prueba de consumo es hecha en la ciudad de Bogotá con tráfico vivo y no corresponde a una prueba de laboratorio.