El futuro en esta materia es prometedor porque es un elemento fundamental para implementar conducción autónoma en vehículos.
Décadas atrás, pensar en vehículos conectados estaba reservado a las producciones del séptimo arte o de la pantalla chica. La actualidad es totalmente diferente.
La conectividad de los vehículos es una realidad que ofrece beneficios desde la perspectiva de la seguridad vial, así como a los procesos logísticos en los sectores productivos.
El futuro en esta materia es prometedor dado que la conectividad es un elemento fundamental para implementar conducción autónoma en vehículos.
El concepto de conectividad es más amplio de lo que actualmente vislumbramos. La conectividad implica un flujo constante de información desde el vehículo (telemetría), entre vehículos (interconexión entre usuarios de la vía), información del entorno (condiciones de la ruta o tráfico) y ecosistemas de asistencia o servicios.
En un futuro no muy lejano, prácticamente podremos hacer todo desde la comodidad de nuestro vehículo.
¿Cuáles son los beneficios de la conectividad respecto de la seguridad vial?
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