Land Rover es reconocido mundialmente por sus vehículos para todo terreno y hay una propuesta que parece exceder la realidad.
El Back Packer Concept está pensado en los destinos más remotos y desolados del mundo; aquellos donde una muy poca parte de la población siquiera piensa en ir. De hecho, las llantas son sólidas para evitar que por un pinchazo, sus pasajeros queden en la mitad de la nada.
Este vehículo tiene un mecanismo en el techo que le permite removerse completamente, convirtiéndolo en un convertible. Pero como esto no es suficiente, también puede colocarse una carpa sobre la cabina, plegar los asientos y convertirla en una tienda en la que duermen dos con tranquilidad.
La información disponible no habla de la motorización, pero es de suponer que hay un motor eléctrico con suficiente capacidad, que se encarga del desplazamiento para llegar a esos destinos donde obviamente no es fácil llegar.
Estos son los conceptos puros: vehículos que con certeza no llegarán a producción, pero que sirven para el desarrollo de los vehículos del futuro.