La Fórmula 1 es uno de los deportes con más revisiones y modificaciones año tras año. Y bajo ese parámetro, si pensamos en los próximos treinta años, la posible foto es de las mas inciertas.
A pesar de ello, McLaren Applied Technologies tuvo la iniciativa de pensar en lo que podría ser el deporte en el año 2050; el año en que la fórmula 1 cumple su centenario.
Un ejercicio de cualquier manera interesante, dada la velocidad de la tecnología, la autonomía cada vez mayor de los vehículos y el siempre cambiante ambiente que envuelve a la Formula 1.
La imaginación de McLaren llegó a una conclusión llamada MCLExtreme: un vehículo que mantiene al piloto humano, pero obviamente, muy lejana de lo que conocemos hoy.
Los cambios son muchos y grandes; de hecho, algunos que no se ven, como la motorización eléctrica y el método inductivo de recarga, que permitirá una carrera completa sin necesidad de alimentar baterías y una velocidad superior a los 300 kilómetros por hora.
Los que si se ven, incluyen un alerón delantero suspendido, dos alerones traseros que se curvan sobre las llantas y cabina para proteger al piloto.
En el capítulo aerodinámico, el MCLExtreme hace uso de elementos activos que de acuerdo con las condiciones cambian de posición para ofrecer mayor fuerza al piso o menor resistencia al viento, según se requiera.
En cuanto a interacción con los humanos, el MCLExtreme se conectará con el traje y el casco del piloto y el personal de pits; además, podrá cambiar de color para representar las emociones del piloto.