El can robótico autónomo “SpOTTO” recopila datos para el modelo digital de la planta Hams Hall de BMW Group y apoya al mantenimiento.
Un robot de cuatro patas llamado “SpOTTO” se unió recientemente al equipo de la Planta Hams Hall de BMW Group en el Reino Unido.
El perro robótico autónomo escanea las instalaciones de la Planta, apoya al mantenimiento y asegura que los procesos de producción se lleven a cabo sin problemas.
Equipado con sensores visuales, térmicos y acústicos, SpOTTO se despliega en una serie de casos de uso único: por un lado, recopila datos valiosos para el modelo digital de la Planta.
Por el otro lado, funciona como un perro guardián, supervisando el mantenimiento de las instalaciones de producción.
“La virtualización, la automatización y la inteligencia artificial son pilares centrales de la BMW iFACTORY,” explica Klaus von Moltke, VPS de Producción de Motores en BMW AG.
“Ejemplos de aplicación audaces e innovadores como éstos en la Planta Hams Hall demuestran toda la gama de posibilidades.”