Tras 10 años de malas decisiones GM cierra Colmotores

La transición es hacia un modelo de compañía nacional de comercialización de vehículos y servicios posventa.

General Motors anunció que las operaciones en Colombia y Ecuador realizarán la transición a un modelo de compañías nacionales de comercialización y servicios posventa.

Las operaciones de fabricación cesarán en la planta de Colmotores de Colombia y el proceso de desmontaje comienza hoy con un equipo reducido. En la planta de OBB en Ecuador la fabricación cesará a finales de agosto de 2024.

La transformación de las operaciones a empresas nacionales de comercialización de vehículos y servicio posventa obedece a que la planta de Colmotores está operando al 9% de su capacidad instalada y GM OBB está operando al 13%.

General Motors mantendrá su presencia histórica en Colombia y Ecuador a través de su marca Chevrolet y su red de empresas y negocios como GMICA-Isuzu, GM Financial y Chevyplan, así como sus socios comerciales, su red de concesionarios y los servicios de conectividad de OnStar.

«Las acciones que anunciamos hoy son fundamentales para garantizar que estemos mejor posicionados para ofrecer a nuestros clientes los vehículos y las tecnologías más avanzados, e impulsar la transformación de la industria en Colombia y Ecuador hacia un futuro sin emisiones», aseguró Shilpan Amin, presidente de GM Internacional.

El presidente y director general de GM Sudamérica, Santiago Chamorro, afirmó que : “Después de una cuidadosa evaluación, decidimos que el modelo de empresa nacional enfocada en la comercialización de vehículos y centrada en el cliente es el camino correcto para competir en Ecuador y Colombia en el futuro”.

“La Compañía entiende el impacto que esta decisión tiene en los empleados, por esto desarrolló un plan de cierre de los contratos laborales con beneficios que están por encima de los requisitos legales, así como un amplio y sólido programa de reubicación laboral”, complementó Chamorro.

Desde la nueva estructura comercial de General Motors Colombia, la Compañía continuará invirtiendo en el país, ratificando su compromiso de contribuir significativamente a su progreso.

Un decenio para olvidar

Durante la segunda década del siglo XXI se vieron varios movimientos en Colmotores, entre ellos el cambio de CKD a origen chino y el fin de la comercialización de Suzuki e Isuzu, dada la venta accionaria de GM en esas dos corporaciones, producto a su vez de la quiebra de 2008.

Pero como los cambios se demoran en llegar de las casas matrices a Colombia, fue a partir del segundo decenio de este siglo cuando comenzaron los desastres.

Previamente GM no observó el los vientos de cambio en el mercado colombiano cuando le negó la posibilidad al concesionario Los Coches de volverse multimarca. En ese momento, Los Coches era uno de los más grandes de la marca en Latinoamérica y el retiro de esa red supuso una importante pérdida que los demás concesionarios no supieron aprovechar.

2013: instalación de la ZF para el estampado de piezas, supuestamente para exportación, pero de dos modelos que en ese momento ya eran obsoletos y cuya producción ampliaba la capacidad instalada del área Latam, en lugar de complementarla.

2014: comenzó el cambio de presidentes de la compañía cuando Santiago Chamorro le entregó a Jorge Mejía y de ahí en adelante inició la pérdida de participación de mercado.

2017 – 2020: sale Jorge Mejía por mala gestión y por la reestructuración de GM en todo el mundo, liderada por la CEO Mary Barra. Comienza una seguidilla de presidentes en Colmotores que ni siquiera vivían en Colombia.

2018: perdió el liderazgo del mercado que tuvo por más de 35 años y se ubicó segundo, detrás de su archirrival Renault. Luego de la publicación de los pobres resultados de Chevrolet en LatinNcap, Mary Barra expresó que los consumidores latinoamericanos no merecían carros seguros.

2020 – 2022: la planta fue cerrada por pandemia, pero de ahí en adelante nunca recuperó los turnos completos y funcionó intermitentemente.

2023: perdió el segundo lugar

2024: fin del ensamble, lo cual supone el dejar atrás un pesado lastre a favor del negocio de importación.

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